Una empresa española busca anular el registro de la icónica marca colombiana Frisby en la Unión Europea por falta de uso comercial.
La reconocida cadena colombiana de pollo frito, Frisby, se enfrenta actualmente a un proceso legal en la Unión Europea por los derechos de su marca registrada. El conflicto surge luego de que Frisby España S.L., una empresa sin relación con la original, solicitara la nulidad del registro de marca de Frisby Colombia, alegando que no ha sido utilizada de forma activa en territorio europeo durante los últimos cinco años.
Frisby había registrado su nombre comercial en la Unión Europea desde el año 2005, anticipando una posible expansión internacional. Sin embargo, al no establecer operaciones concretas en la región ni hacer uso comercial efectivo del nombre, su registro quedó vulnerable ante solicitudes de terceros.
Aprovechando esa inactividad, la empresa española inició operaciones con el mismo nombre, generando confusión entre los consumidores y presentando una oportunidad legal para reclamar el uso exclusivo de la marca dentro del bloque europeo. El caso ha captado la atención del sector empresarial colombiano, al tratarse de una de las marcas más icónicas del país.
Según expertos en propiedad intelectual, la normativa europea exige un uso real y constante de las marcas registradas; de lo contrario, estas pueden ser anuladas si otro actor demuestra interés comercial legítimo. Si Frisby Colombia no logra probar su presencia activa en la UE, podría perder los derechos sobre su marca en ese mercado.
Este caso pone de relieve la importancia de no solo registrar una marca en el extranjero, sino también de mantener una estrategia de uso y presencia real, especialmente para empresas con planes de expansión global.
